Las competencias digitales hoy son necesarias para poder adaptarse a la salud digital. Es un desafío lograr que todas las personas tengan las herramientas necesarias para utilizar las plataformas virtuales. Sin embargo, la educación sobre las nuevas tecnologías puede ayudar a que las personas se familiaricen con estos ecosistemas digitales.
La evolución de internet y su masificación en la sociedad ha cambiado la forma de comunicarnos. La tecnología se ha hecho parte de la vida cotidiana de las personas e instituciones, alcanzado al sector sanitario.
La salud digital se integra a la medicina con una propuesta de valor de mejorar el sistema en sí mismo. Las barreras físicas, la descentralización de los servicios hospitalarios y una mayor autonomía en los pacientes, se presentan como uno de los principales beneficios para el sector salud.
Esta transformación digital aporta mejoras en la calidad de vida de los pacientes, además de eficientar el trabajo médico. Por ejemplo, algunas herramientas digitales han ayudando a gestionar los tiempos y a tener una mayor interacción con los pacientes. Sin embargo, ante este cambio, resulta relevante pensar en las competencias digitales que necesitan los profesionales de la salud para aprender a manipular las herramientas online y así trabajar de forma óptima ante esta nueva modalidad.
La integración de la tecnología y los sistemas de información en el sector sanitario exige que las personas tengan las competencias necesarias para interactuar con estas plataformas. El correcto uso de los sistemas digitales garantizará que los beneficios de la salud digital se materialicen de forma correcta.
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El Barómetro de Brecha Ciudadana Digital, elaborado por Subtel, indica que en Chile la brecha digital se mantiene alta. Por ejemplo, respecto a la realización de trámites en salud, el 83% entre las personas de mayores ingresos utiliza soportes digitales, mientras que solo el 57% de las personas de menores ingresos las usan.
Esta brecha digital también se acentúa a nivel generacional. La tecnología crece de forma exponencial, pero las personas de mayor edad tienen dificultades para adaptarse a las plataformas digitales y así poder hacer un uso eficiente de ellas.
En esa línea, el desarrollo de la salud digital y su implementación en los sistemas sanitarios deben ir acompañados de estrategias que permitan que los usuarios (sean pacientes o profesionales y trabajadores de la salud) obtengan las competencias necesarias para su uso.
La transformación digital en salud debe ir acompañada de un proceso de educación del uso de las tecnologías. El acelerado desarrollo de la digitalización en el ámbito de la atención, los procesos administrativos e investigación médica, requiere de personas con un grado de alfabetización en la materia.
La eficiencia de la implementación de la salud digital dependerá de las habilidades y conocimientos que tengan los profesionales y administrativos de la salud, además de los médicos. Las competencias para el uso de las Tics será clave para el cumplimiento de objetivos en esta área.
Las competencias digitales que deben tener todos los actores de la salud son:
Esta competencia implica reconocer todos los dispositivos y herramientas informáticas que operan en el sistema de salud. Saber diferenciar la utilidad de cada uno de ellos e internalizar para qué circunstancias deben ser utilizados dentro del ecosistema de salud.
Utilizar los canales de información de forma apropiada para ingresar y información y comunicarlas de forma eficiente y eficaz a quienes corresponda. Aquí también resulta importante reconocer las redes profesionales que se forman en internet para interactuar con otros profesionales. El uso de redes sociales, grupos de whatsapp de médicos y plataformas online disponibles para la transmisión de conferencias o de reuniones son algunos ejemplos de ellos.
Internet es un nuevo espacio donde el médico puede compartir información sobre salud. Las redes sociales, los blogs y foros abiertos a pacientes permiten generar cercanía con las personas y es una vitrina para que el profesional pueda darse a conocer entre sus potenciales pacientes.
Las habilidades comunicacionales e informáticas son imprescindibles para llegar a aquellas personas que buscan en internet información de relevancia médica. Sin embargo, siempre se debe recalcar que ante cualquier problema de salud, siempre se debe acudir a una cita médica para confirmar o descartar enfermedades.
Existen herramientas digitales como videoconferencias, blogs y grupos de discusión que permiten compartir información profesional y experiencias con colegas en otras latitudes del planeta. Los congresos científicos-médicos las han aprovechado para que la distancia geográfica no sea un impedimento al compartir hallazgos científicos importantes para la mejora continua de las distintas especialidades médicas.
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La transformación del sector sanitario no es fácil, por ello en imed hemos desarrollado herramientas seguras y de fácil manejo para que los médicos del país puedan adoptar la tecnología y brindar un mejor servicio a sus pacientes.
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