La salud en América Latina enfrenta una serie de desafíos que impactan en la calidad de vida de sus habitantes. Entre estos, uno de los más urgentes es el impulso y la implementación efectiva de la salud digital en la región, con el fin de garantizar la atención en todos los rincones del continente.
En este artículo abordaremos cuáles son los principales desafíos que tiene la región para garantizar las atenciones de salud a la población.
El acceso universal a la salud es una de las demandas históricas que tiene el continente. La desigualdad socioeconómica entre países y dentro de ellos, además de la falta de políticas públicas que garanticen el acceso a la salud son algunos de los problemas que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) han detectado y mencionado de forma insistente.
Ante los desafíos, avances y oportunidades para el sector salud, ha destacado el desarrollo de la transformación digital (TD), impulsada por actores privados y públicos de la región, los que aspiran aprovechar este recurso para estructurar los sistemas de salud y permitir un mayor acceso a esta.
La salud digital representa un cambio transformador en la forma en que se administra la atención médica, utilizando tecnologías de la información y la comunicación para mejorar el acceso, la eficiencia y la calidad de los servicios de salud. Sin embargo, América Latina se enfrenta a varios obstáculos para adoptar plenamente esta revolución en salud:
A pesar del aumento en la penetración de dispositivos móviles en la región, existen disparidades significativas en el acceso a la tecnología. Muchas comunidades rurales o marginadas carecen de acceso a internet o de dispositivos adecuados, lo que limita su capacidad para beneficiarse de la salud digital.
La falta de infraestructura tecnológica adecuada, como sistemas de información de salud interoperables y seguros, obstaculiza la adopción y la implementación efectiva de soluciones digitales. Esto dificulta la recopilación y el intercambio de datos cruciales para una atención médica coordinada y de calidad.
Existe una brecha en la capacitación y alfabetización digital en el ámbito de la salud. Tanto los profesionales de la salud como los pacientes necesitan estar familiarizados con las herramientas digitales para aprovechar al máximo sus beneficios. La falta de formación adecuada limita la adopción y el uso efectivo de las soluciones digitales.
Los marcos regulatorios a menudo son insuficientes o no están actualizados para abordar las complejidades y desafíos éticos que surgen con el uso de la salud digital. Además, la seguridad de los datos de salud es una preocupación fundamental, ya que la privacidad y la integridad de la información deben estar garantizadas para fomentar la confianza en estas tecnologías.
Los organismos latinoamericanos reconocen que la salud digital puede ser un puente para subsanar la desigualdad en acceso, simplificación de trámites sanitarios y un mayor resguardo de la información médica. En esa línea, se han barajado oportunidades que ya cuentan con implementaciones incipientes para transformar la atención médica en América Latina:
La telemedicina permite a los pacientes acceder a la atención médica de manera remota, superando las barreras geográficas y mejorando el acceso a servicios especializados, especialmente en áreas rurales o con recursos limitados.
La implementación de registros clínicos electrónicos facilita el intercambio de información entre diferentes proveedores de atención médica, lo que mejora la continuidad en el cuidado del paciente y reduce errores médicos.
El diseño de dispositivos que permitan la verificación de identidad de los pacientes, puede ayudar a prevenir fraudes y asegurar una atención más expedita a las personas. Un ejemplo en Chile es la utilización de un verificador de huella dactilar que permite a los centros médicos acceder a la información del paciente de forma rápida, segura y oportuna.
Con software especializados es posible manejar grandes flujos de información, conectando a los actores de salud para una comunicación más expedita y eficiente para la tramitación y gestión de documentación médica. La digitalización de documentos y su gestión también es una medida sustentable que ayuda a disminuir el uso de papel y la huella de carbono de hospitales, centros médicos, empresas y gobiernos.
La aplicación de la inteligencia artificial y el análisis de datos en salud pueden ayudar a identificar patrones, predecir brotes de enfermedades y personalizar tratamientos, mejorando la eficiencia y efectividad de la atención médica.
En imed llevamos 20 años desarrollando servicios sustentables basados en tecnología, innovación, eficiencia y confianza para facilitar los procesos y trámites de salud de las personas e instituciones. Nuestro propósito es mejorar el acceso, oportunidad y conveniencia en la atención de salud en Latinoamérica. Conoce nuestras soluciones para prestadores y pacientes.